Este
post ha sido rehecho ya tres veces y no puedo continuar. Para otra ocasión
quedarán el granadero Martín Álvarez y su defensa de la bandera en la batalla del Cabo de San Vicente en 1797 (ver arriba), Álvaro de Bazán, Pizarro, Hernán Cortés, Blas de
Lezo, Diego García de Paredes o Marco Furio Camilo.
La
única duda existencial que tengo, dado lo que me aguarda, es si afrontar la
táctica agresiva berserker,
la contemporizadora de Fabio Máximo Cunctator,
o una grácil actitud intermedia a lo Miyamoto Musashi.
En
cualquier caso, la siguiente imagen es algo más que conceptual. Un peón al que
han dejado solo desde su propio equipo contra las dieciséis piezas del equipo
contrario. Un desafío de lo más interesante y del que nadie piensa que puedas
salir victorioso.
Pensamiento
del día: Fortis cadere, cedere non potest.
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